Antes de la guerra, Zofía estudiaba Derecho en la Universidad en Lwow, su ciudad natal. Estaba en tercer año, cuando fue expulsada por ser judía. Logró escapar del gueto en el que se encontraba. Se consiguió documentación falsa, haciéndose pasar por polaca cristiana y cambiando su nombre de «Zofía Acht» a «Krystyna Adamska». Luego fue enviada como polaca a un campo de trabajo forzado en Alemania, en la frontera con Austria. En ese entonces estaba casada y embarazada. Su esposo fue asesinado, y ella tuvo que abortar con 6 meses de embarazo, para salvar su vida en el campo de trabajo forzado. Fue la única sobreviviente de su familia, sus padres (Oscar Acht y Klara Reiner) fueron asesinados. Su hermano era violinista de la Orquesta Filarmónica, lo tomaron preso y luego se arrancó, motivo por el cual cuando lo atraparon le cortaron sus manos y luego murió. Después de la guerra, se fue a Praga, donde conoció a Josef Broder, mientras ambos trabajaban en la Embajada de Polonia. En 1948 se casaron y tuvieron dos hijas, Sylvia y Tamara. En 1958 producto del comunismo, deciden emigrar a Chile, donde tenían parientes (Familia Halpern), quienes los acogieron. En 1970 se mudó a Buenos Aires, Argentina, con su esposo (por la llegada del comunismo a Chile). Después de enviudar, volvió a vivir a Chile. Falleció en Santiago, en 1994.

Información obtenida por Abro Memoria, proyecto conjunto de Memoria Viva y el Archivo Judío de Chile.