En 1944, con el gobierno de Szálasi, la situación cambió drásticamente para los judíos de Hungría. Su padre fue deportado a trabajos forzados y a su madre también la deportarton. Gyuri se atrevió a sacarse la estrella amarilla y se dirigió al contacto que le dejó su madre. Gracias a la alerta de un funcionario sueco con su hermano se fueron escondiendo en diferentes lugares de la ciudad. La madre y la tía materna lograron conseguir documentos falsos. Sobrevivieron la guerra escondidos, con mucho frío y hambre. Luego del fin de la guerra sufrieron con los comunistas. Tras pasar un tiempo en Israel, Gyuri se volvió a reunir con sus padres y se asentaron en Chile.