Antes que comenzara la guerra, su madre logró sacarlo de Alemania a él y su hermano. Él logró escapar y llegó a Chile solo. Su hermano, Rudolph M. Britzmann, escapó a China, luego se enroló en el Ejercito Británico y sirvió como traductor en los juicios de Newrenberg (para lo que tuvo que cambiarse el nombre a Roger Bryan). Su madre no logró escapar, y durante la guerra mantuvo correspondencia con sus hijos pidiendo auxilio, sin embargo muere finalmente en Auschwitz.
Información obtenida por Abro Memoria, proyecto conjunto de Memoria Viva y el Archivo Judío de Chile.